Washington, 28 jun (EFE).- Las autoridades migratorias de EEUU pidieron al Pentágono ayuda para acoger a 12.000 indocumentados, 2.000 de ellos en un plazo de 45 días, en bases militares o campamentos construidos en terrenos de su propiedad.
"El Pentágono ha recibido la petición de ayuda del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para acoger y ocuparse de familias inmigrantes hasta 12.000 personas", informó este miércoles el Departamento de Defensa en un comunicado.
La petición insta al Pentágono a "localizar instalaciones disponibles" o, de no ser posible, "terrenos" para construir tres campamentos que alberguen hasta 4.000 personas cada uno.
Los campamentos, según el DHS le dijo al Pentágono, deberían construirse en Texas, Nuevo México, Arizona o California, los estados fronterizos con México para ubicar a los indocumentados cerca de las áreas de detención.
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"El DHS requiere la capacidad solicitada para albergar a 2.000 personas en un plazo de 45 días", añadió el Pentágono.
El jefe del Pentágono, James Mattis, ya informó este lunes de que se están acondicionando instalaciones en el cuartel de Fort Bliss y en la base de la Fuerza Aérea de Goodfellow, ambas en Texas, para acoger a inmigrantes.
Mattis resaltó la importancia de "dar cobijo a gente que no lo tiene" y comparó la medida con otras acciones similares ejecutadas por el Departamento de Defensa en diversas crisis humanitarias.
El viernes, la revista Time informó que la Armada trabaja en un plan para la construcción de campamentos "temporales y austeros" en instalaciones castrenses en las que acoger a miles de indocumentados.
El Gobierno de Donald Trump se planteó la reclusión de indocumentados en instalaciones militares tras suspender su polémica estrategia de "tolerancia cero" con la inmigración, que había separado durante dos meses a padres e hijos que cruzaban la frontera sin papeles.
Con las nuevas plazas del Pentágono, el Gobierno se asegura tener espacio suficiente para no dejar en libertad a las familias inmigrantes tras su detención sin depender de la capacidad de los saturados centros de detención para inmigrantes.