MOSCÚ (Sputnik) — El gobernador David Ige solicitó al presidente de EEUU, Donald Trump, que declare al estado de Hawái zona de desastre como resultado de la actividad sísmica y la erupción volcánica que continúa en el archipiélago.
La medida permitiría poner en marcha un programa de asistencia pública al condado de Hawái, así como un programa de subvenciones para la mitigación de riesgos en todo el estado, señala una nota de prensa publicada en el sitio web del gobernador.
EE.UU: Se incendia fábrica de municiones en Dakota del Sur
"A medida que se abren nuevas grietas y aumenta la exposición a gases tóxicos, se incrementa el riesgo de una evacuación a gran escala. Una evacuación en masa desde las zonas bajas del distrito de Puna estaría más allá de las capacidades actuales del condado y del estado, y desbordaría rápidamente nuestros recursos colectivos", alega el gobernador.
Desde el 3 de mayo, las autoridades locales gastaron más de 400.000 dólares en las medidas de protección contra los terremotos y los brotes de lava en la zona de Kilauea, pero podrían necesitar más de 2,9 millones de dólares para proteger a los residentes en los próximos 30 días.
Los costos se dispararán en el caso de que se necesiten evacuaciones a gran escala por aire y mar.
El volcán Kilauea entró este jueves en erupción tras varios días de temblores en la zona, en la que en los días posteriores se han registrado varios terremotos de una magnitud de hasta 6,9 en la escala abierta de Richter.
Las autoridades habilitaron desde entonces dos albergues y evacuaron la zona residencial más próxima al volcán, conocida como Leilani Estates.
En esta zona residencial se abrieron varias grietas de las que salieron lava y vapor, según videos e imágenes que fueron publicadas en las redes sociales por los habitantes de ese lugar.
El volcán Kilauea está localizado al sureste de la isla de Hawái, que en su extremo suroriental es la mayor del archipiélago y en la que viven unas 185.000 personas.