La desaparición de Amelia Earhart, ¿un misterio resuelto?

travesia aerea del atlantico

El profesor de Antropologia de la Universidad de Tennesse Richard Jantz defiende que la estadounidense Amelia Earhart cayó al océano Pacífico y murió en la isla de Nikumaroro.

Richard Jantz cree que los huesos encontrados en la isla en 1940 pertenecen de hecho a una mujer y no a un hombre como se creyó durante mucho tiempo. Basa los argumentos en un moderno programa de ordenador, que permite la comparación osea.

Amelia Earhart habría muerto en 1937 cuando intentaba ser la primera mujer en dar la vuelta al mundo.

El avión que pilotaba arrancó de Oakland en Estados Unidos. Después de escalas en América del Sur, en África y en Asia desapareció sobre el océano Pacífico, después de dejar la papúa nueva Guinea, muy cerca del final.

Nikumaroro, un atolón de la república de Kiribati ha sido su destino final.

 

Fue a la decimosexta mujer a obtener una licencia de vuelo en todo el mundo, y que se convirtió en la primera en hacer la travesía aerea del atlantico.

En abril de 1928, Amelia recibió una llamada que cambiaría su vida: el capitán H.H. Railey le preguntó si quería ser la primera mujer en cruzar el océano Atlántico. La idea de la aventura había sido de Amy Guest, una aristócrata estadounidense que había adquirido un Fokker F.VII. En un primer momento, ella era quien pilotaría la nave, pero, por presiones de su familia, había desistido. Entonces, la familia Guest contrató a George Putnam, un publicista de Nueva York, para que encontrase la mujer indicada.

Después de conocer a los coordinadores de la travesía, se decidió que Amelia acompañara al piloto Wilmer Stultz y al mecánico Louis Gordon.

La nave fue bautizada como Friendship (amistad), y despegó el 3 de junio de 1928 hacia Halifax, Nueva Escocia. Tras esperar a que mejorase el tiempo, partieron hasta el 18 rumbo a Europa. Llegaron a Burry Port, en el sur de Gales, (con poca gasolina) y no a Irlanda, como habían planeado.

La misma Amelia reconoció que todo el trabajo lo hicieron los pilotos, pero al llegar los reporteros los ignoraron y la abordaron a ella. Después recibió felicitaciones del mismo presidente Calvin Coolidge. A raíz de este viaje empezó a ser conocida como Lady Lindy, por su parecido al aviador Charles Lindbergh.

Pero no quedó ahí. Revolucionó el matrimonio, al negarse a cambiar de nombre y exigir el reparto de tareas.

Ahora es un icono, entre las heroínas de la historia … e incluso tiene su propia muñeca Barbie.