Un tren se descarriló cerca de East Main Road, en Attica (estado de Nueva York) a las 16:15 (hora local). El tren era impulsado por dos locomotoras y llevaba 43 vagones de carga, todos llenos de automóviles. No transportaba materiales peligrosos, según ha informado el Departamento de Policía de Attica.
Ambas locomotoras se descarrilaron, al igual que un número desconocido de vagones, algunos de ellos están en llamas.
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Los únicos tripulantes del tren, un ingeniero y un conductor, sufrieron lesiones no mortales y fueron trasladados a un hospital local, informa WHEC.
Por ahora no se han proporcionado más detalles del incidente.
Train derailment in Attica, NY. pic.twitter.com/xyMfSq6PBv
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#BREAKING—police in #Attica, Wyoming County say they're responding to a CSX freight train derailment near East Main Street. (Photos: Tim Pohl) pic.twitter.com/lf5xvBHp9u
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Here are some early photos form the scene of the train crash in Attica from Michelle Pohl and Jessica Graham: pic.twitter.com/K0bdw5c9iA
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Another photo of the Attica train wreck, from Tim Pohl: pic.twitter.com/d3moVTgFzY
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El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, presentó este lunes su plan para "reconstruir la desmoronada infraestructura" del país, que busca movilizar hasta 1,5 billones de dólares en los próximos diez años en un plan que combina fondos federales y estatales con incentivos para el sector privado.
"Tenemos que reconstruir nuestra desmoronada infraestructura (…) Se trata del plan más grande y atrevido" del país, dijo Trump en un encuentro con gobernadores y alcaldes en la Casa Blanca, al dar a conocer algunos detalles de su propuesta.
Finalmente, y tras meses de espera, el mandatario divulgó su plan para revitalizar la red de infraestructura de Estados Unidos, que en más de una ocasión ha señalado que es "tercemundista".
Donald citó como ejemplo a las empresas de transporte de camiones que, dijo, se "lamentan del tremendo daño que muestran sus vehículos debido a que las carreteras están en mal estado".
Para alcanzar los 1,5 billones de dólares prometidos, el presidente confía en que el pequeño porcentaje aportado por el gobierno federal sea multiplicado por la labor conjunta de los estados y entidades locales en asociación con el sector privado.
Del total, 200.000 millones de dólares serán fondos federales que el gobernante pedirá directamente al Congreso durante los próximos diez años, y la mitad de estos irán destinados a aquellos estados o localidades a los que les quede poco para completar un proyecto ya en marcha.
