El programa de la NSA permite interceptar sin orden judicial las comunicaciones de ciudadanos extranjeros fuera de EE.UU.
El presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump, firmó este viernes una ley que renueva por seis años más el programa de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA), que permite el espionaje a ciudadanos extranjeros fuera del territorio estadounidense.
"Acabo de firmar la Ley 702 que reautoriza la recopilación de inteligencia extranjera. Esta no es la misma Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA, por sus siglas en inglés), que fue tan ultrajada durante las elecciones" de 2016, anunció el mandatario estadounidense, en su cuenta de la red social Twitter.
La ley renueva la Sección 702 de la FISA que autoriza al Gobierno de EE.UU. interceptar sin orden judicial las comunicaciones, como mensajes de correo electrónico y llamadas telefónicas de extranjeros fuera de EE.UU., incluidas aquellas que éstos mantienen con ciudadanos estadounidenses.
Trump aseguró que la ley "es vital para mantener segura la nación. Como demuestran los recientes ataques en Nueva York y en el resto del mundo, afrontamos una amenaza constante de las redes terroristas extranjeras y otros actores extranjeros que nos quieren hacer daño".
"Para detectar y prevenir los ataques antes de que ocurran, tenemos que poder interceptar las comunicaciones de objetivos extranjeros sobre los que hay sospechas razonables de que poseen información de inteligencia extranjera", justificó, al tiempo que consideró que el programa de la NSA "ha salvado vidas estadounidenses".
El programa estuvo sujeto a escrutinio tras las filtraciones del exanalista de la Agencia Nacional de Seguridad de EE.UU., Edward Snowden, en 2013 debido a sus implicaciones sobre la privacidad, que han sido criticadas por diversas organizaciones defensoras de los derechos civiles.
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