Washington, 9 ene (EFE).- El presidente de EE.UU., Donald Trump, aseguró hoy que el Congreso recibirá en los próximos días un "proyecto de ley lleno de amor" para reemplazar el programa DACA y reforzar la frontera con México, y dijo que una vez que se solucione ese tema podría aprobarse una reforma migratoria más amplia.
En una reunión en la Casa Blanca con unos 25 congresistas y senadores de ambos partidos, Trump anunció que el legislador republicano Bob Goodlatte presentará en los próximos días un proyecto de ley para sustituir el programa DACA, que protegió de la deportación a miles de jóvenes indocumentados apodados "soñadores".
Será un "proyecto de ley lleno de amor" hacia los "soñadores", pero también debe incluir medidas para fortalecer la frontera con México, acabar con la "migración en cadena" que permite a los residentes permanentes en EE.UU. traer al país a sus familiares, y poner fin a la llamada lotería de visados, advirtió Trump.
El senador republicano Lindsey Graham, que estaba presente en la reunión, recordó que él lleva años trabajando en temas migratorios y que apoya un camino a la ciudadanía para los indocumentados en el país, y retó a Trump a ir más allá de la solución para los "soñadores" e impulsar una reforma migratoria integral.
"Usted ha creado una oportunidad aquí, señor presidente, y tiene que rematar las cosas", indicó Graham.
Trump respondió: "Si quieren ir un paso más allá, asumo la carga. Ustedes (en el Congreso) no están tan lejos de (aprobar) una reforma migratoria integral".
"La (reforma migratoria) integral será la fase dos. Aprobaremos esto y después nos metemos con la (reforma) integral al día siguiente", afirmó Trump.
No está claro si Trump apoyaría una vía a la ciudadanía para los 11 millones de indocumentados que se calcula viven en Estados Unidos. En febrero de 2017, el presidente dijo que solo apoyaría la legalización -y no la ciudadanía- de aquellos inmigrantes que no hubieran cometido delitos graves o violentos.
La Casa Blanca y el Congreso quieren aprobar cuanto antes una solución para los 690.000 jóvenes que, hasta septiembre pasado, estaban amparados por DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), un programa impulsado por Barack Obama en 2012.
Trump anunció en septiembre pasado el fin del programa DACA y dio al Congreso hasta el próximo 5 de marzo para que solucionara la situación migratoria de los "soñadores", pero ha condicionado cualquier ley sobre ese tema a la aprobación de fondos para el muro en la frontera con México, entre otras exigencias.
El presidente reiteró hoy que no aceptará ningún acuerdo sobre DACA que no incluya el muro y pidió a la oposición "poner el país por delante del partido".
"Lo necesitamos. Me encantaría no construir el muro, pero necesitamos el muro. Si no tenemos el muro, no podemos tener seguridad", indicó Trump.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, dijo en un comunicado tras el encuentro que los legisladores y el presidente habían alcanzado "un acuerdo para negociar legislación" que incluya reformas para reemplazar DACA, lograr "seguridad fronteriza", y acabar con la "migración en cadena" y la lotería de visados.