PALM BEACH, Florida, EE.UU. (AP) — Antes de su primera Navidad como presidente de Estados Unidos, Donald Trump enumeró a los que cree que se portaron mal _un alto cargo del FBI, los medios_ y a los que fueron buenos, como las tropas estadounidenses destinadas en el extranjero y sus familias, así como niños que esperaban con ansia la llegada de Santa Claus. También encontró tiempo para el golf, tiempo para la familia y tiempo para la iglesia.
“Feliz Navidad”, dijo Trump el domingo por la noche cuando llegó con su esposa, Melania Trump, a la iglesia de Bethesda-by-the-Sea en Palm Beach, Florida. Los fieles le recibieron con una ovación en pie. Los Trump se casaron en esa iglesia en 2005.
Antes el domingo, Trump intentó animar a los soldados estadounidenses que están lejos de sus familias para “defender a todas nuestras familias, nuestras libertades y nuestro orgullo”.
“Cada corazón estadounidense les da las gracias, y pedimos a Dios que cuide de ustedes y que cuide de sus familias”, dijo a miembros del Ejército de Tierra, la Marina, la Fuerza Aérea, la Infantería de Marina y la Guardia Costera a través de una videoconferencia desde su propiedad y club privado en Palm Beach, donde está pasando las fiestas con su familia.
Trump hizo cumplidos a todas las ramas del Ejército, aunque tuvo sus elogios más efusivos para la Guardia Costera, que lo impresionó con sus operaciones de rescate durante la temporada de huracanas.
“Han hecho un trabajo increíble en Texas y Florida y Puerto Rico”, dijo Trump. “Muchos republicanos están muy contentos, pero, tengo que decirles, la gente de Florida, Texas, Puerto Rico y muchos otros estados están aún más contentos. Qué trabajo hicieron… salvaron miles y miles de vidas”.
Los puertorriqueños, sin embargo, podrían discrepar de las afirmaciones del presidente sobre su estado de ánimo.
Más de tres meses después de que el huracán María arrasara la isla, el suministro eléctrico en el territorio estadounidense llega ahora al 65% de la población, con nueve de los 78 municipios puertorriqueños aun totalmente a oscuras.
El Cuerpo de Ingenieros de Estados Unidos estima que no se restablecerá la electricidad en todo Puerto Rico hasta mayo. Más de 200.000 viviendas sufrieron daños y más de 30.000 personas han perdidos sus empleos, desatando un éxodo de más de 200.000 puertorriqueños solo contando los que han viajado a Florida.
Trump comenzó la Nochebuena tuiteando en contra de los que cree que no le apoyan, como el subdirector del FBI Andrew McCabe y los medios de noticias.
Tras jugar al golf en su club privado en West Palm Beach, el presidente participó con su esposa en un acto respondiendo llamadas de niños deseosos de saber cuándo llegaría Papá Noel. Las llamadas son una tradición relacionada con el programa de seguimiento de Santa Claus que mantiene desde hace más de 60 años el Comando Norteamericano de Defensa Aeroespacial (NORAD).
Trump dijo a un niño que llamó desde Mississippi que el estado es “genial” y predijo que “Santa va a tratarte muy bien”. Animó a otro niño de Virginia que esperaba encontrar bloques de construcción bajo su árbol de Navidad. Trump, que se labró su nombre y su fortuna construyendo cosas, le dijo “Eso era lo que siempre me gustaba a mí también”.
“Santa se mueve muy deprisa. Estará en tu casa muy tarde por la noche cuando estés durmiendo”, dijo Trump. Los periodistas solo pudieron oír su lado de las conversaciones.
El presidente cenó con su familia en Nochebuena antes de terminar el día en la iglesia. El menú incluyó pavo, solomillo de ternera, pan de maíz, kale con crema, bollos, puré de papas y salsa de pavo, así como platos de verduras, pescado y varios postres.