Padre del tirador de Las Vegas fue unos de los 10 hombres más buscados del FBI

Benjamin Paddock, padre de Stephen Paddock, autor de la masacre de la noche del domingo en Las Vegas, estaba en la lista de los 10 fugitivos más buscados del FBI en 1968, después de huir de una prisión de Texas ese mismo año.

Paddock padre había sido sentenciado a 20 años de reclusión en el Centro Federal de Corrección en La Tuna, Texas, por asaltar el Banco Nacional de Valley en Phoenix en 1960, según los artículos de entonces publicados en el diario Tuscon Daily Citizen.

El ladrón de bancos tenía múltiples alias, se lo conocía como Perry Archer, Benjamin J. Butlery Leo Genstein, entre otros. Las autoridades de la época lo describían como un psicópata diagnosticado, con tendencias suicidas y, por lo tanto, "extremadamente peligroso".

Diez años después de la fuga, Benjamin Paddock fue localizado por la policía en Oregon. Había estado viviendo bajo el nombre de Bruce Warner Erickson y operaba una sala de bingo en Springfield. Tenía a los vecinos y a las autoridades locales tan engañados que, incluso, recibió varias multas de tráfico, y su identidad falsa no despertaba sospechas.

Más de 40 años después, el apellido vuelve a estar en los diarios estadounidenses. Esta vez no se trata del robo de un banco y tampoco es Benjamin el protagonista. Su hijo, Stephen, masacró a una multitud en Las Vegas. Desde la habitación de un hotel abrió fuego sobre la muchedumbre, asesinó a 58 personas e hirió a más de 400.

 

Paddock hijo era un inversor inmobiliario multimillonario, según su hermano, informa la agencia AP.

Durante el festival de música country Route 91, celebrado en las inmediaciones del hotel Mandalay Bay Casino, Stephen Craig Paddock abrió fuego contra la multitud que asistía al concierto desde el piso 32 del establecimiento. Según testigos presenciales, el tiroteo duró entre 10 y 15 minutos, casi sin interrupción.

El tiroteo ha dejado al menos 58 muertos y 515 heridos, el propio agresor se suicidó. El grupo terrorista del Estado Islámico ha reivindicado la autoría del ataque.

El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha ofrecido sus "más calurosas condolencias y simpatías a las víctimas y familias del terrible tiroteo de Las Vegas".

Trump condenó hoy como "un acto de pura maldad" el tiroteo ocurrido en Las Vegas, donde al menos 50 personas murieron y más de 400 resultaron heridas, y anunció que el miércoles visitará esa ciudad para reunirse con los familiares de las víctimas y los policías.