Washington, 22 ago (EFE).- El Servicio Secreto, encargado de la protección del presidente estadounidense, Donald Trump, y su familia, volvió a permitir el tráfico de personas y vehículos en las calles cercanas a la Casa Blanca tras investigar un "paquete sospechoso", hallado esta misma tarde cerca de la mansión presidencial.
En su cuenta oficial de Twitter, el Servicio Secreto informó de que sus agentes y los miembros del Departamento de Policía de Washington resolvieron la situación creada por el "paquete sospechoso", sin dar más detalles sobre si ese objeto llegó a suponer o no una amenaza.
"El Servicio Secreto y el Departamento de Policía de Washington han despejado la situación creada por el paquete sospechoso cerca de la entrada norte del complejo de la Casa Blanca", dijo el Servicio Secreto en Twitter.
El cierre de las calles cercanas a la Casa Blanca se produjo sobre las 13.00 hora local (17.00 GMT), momento en el que el Servicio Secreto informó en Twitter de la investigación.
En ese momento, parte del Jardín Norte de la residencial presidencial fue evacuado, según informaron algunos de los periodistas que cubren la Casa Blanca y que se encontraban dentro del complejo.
En concreto, el corresponsal de la NBC Peter Alexander informó en su cuenta de Twitter de que los agentes del Servicio Secreto habían pedido a los periodistas que entraran dentro "inmediatamente" y evacuaran el Jardín Norte, donde las televisiones tienen diferentes puestos desde donde sus reporteros informan en directo.
El presidente Trump no estaba en la Casa Blanca, pues se encontraba de camino a Yuma (Arizona), donde tiene previsto reunirse con agentes fronterizos y marines para, posteriormente, participar en un mitin, similar a los que efectuó durante la campaña presidencial.