Miami, 28 jul (EFE).- Un hombre de 25 años cuyo hijo de ocho meses murió a causa de un golpe de calor en una casa móvil cerca de Tampa (costa oeste de Florida, EE.UU.) fue detenido y acusado de homicidio agravado, informaron hoy medios de la zona.
William Francis Hendrickson había sido advertido el día antes de que no debía dejar a sus dos hijos en la habitación sin ventilación donde murió el bebé y donde su otra hija, de dos años, sufrió una deshidratación grave, por lo que fue llevada a un hospital.
Por el caso de su hija está acusado de negligencia agravada por el vínculo.
La madre de los niños, Elizabeth Michelle Rutenbeck, de 24 años, está detenida desde hace unos días por un cargo de agresión a su suegra, la madre de Hendrickson, que vive en la misma casa móvil donde ocurrió la muerte del bebé, según el diario Tampa Bay.
Por la ausencia de la madre, la Policía envió el jueves una dotación a la casa móvil para ver cómo se encontraban los hijos de la pareja.
Cuando los agentes llegaron se encontraron a los niños confinados en una habitación sin aire acondicionado donde la temperatura era de 42,7 grados centígrados.
El bebé tenía una temperatura corporal de 40,8 grados centígrados y no respondía, por lo que avisaron a los paramédicos y trataron de reanimarlo.
Fue declarado muerto en el lugar y su hermana fue llevada a un hospital en Saint Petersburgh, una ciudad cercana.
Según el diario, cuando el día antes los servicios sociales fueron a la casa móvil y le recomendaron que no tuviera a los niños en esa habitación, Hendrickson les dijo que "no tenía otro lugar" donde ponerlos.