La guardia costera estadounidense descargó el lunes en un puerto de Florida 16 toneladas de cocaína incautada en distintas operaciones marítimas y que tienen un valor de venta de 420 millones de dólares.
«Estas cifras son bastante impresionantes», dijo en conferencia de prensa Mark Feder, comandante del barco patrullero «James» de los guardacostas de Estados Unidos, durante la descarga de la droga en el puerto de Fort Lauderdale, 50 Km al norte de Miami.
«Dieciséis toneladas, 420 millones de dólares«, repitió. Esa cifra «es prácticamente lo que se necesita para comprar uno de estos barcos».
Los incontables paquetes yacían en el muelle, cubiertos de plástico sobre soportes de madera enchapada.
Además de la droga, «trajimos a 30 narcotraficantes y los entregamos a distintas procuradurías para su potencial procesamiento», añadió Feder.
Las drogas fueron incautadas a lo largo de 26 días en 17 redadas distintas en aguas internacionales cercanas a las costas de América Central y del Sur, precisaron las autoridades.
Colaboraron en el operativo barcos y helicópteros de la Guardia Costera de Estados Unidos, junto a la nave canadiense «Saskatoon» que llevaba a bordo un equipo del destacamento policial de la guardia costera (LEDET) de EEUU.
La Guardia Costera ha aumentado la presencia de Estados Unidos y la de sus aliados en el Pacífico oriental y el Caribe, que son zonas de tránsito de drogas provenientes de América Central y del Sur.
En las redadas en aguas internacionales -según detalla la propia guardia costera-, las autoridades identifican una nave sospechosa y la rastrean con la colaboración de naves militares aliadas. Luego el abordaje y la incautación son conducidos por personal de la Guardia Costera estadounidense.