WASHINGTON (AP) — Un jovial Donald Trump saludó el martes a la primera ronda de turistas que llegó a la Casa Blanca desde que asumió la presidencia.
Hillary Clinton también estuvo allí… en un retrato.
Trump salió por entre un biombo, para el deleite de turistas que aplaudieron. Muchos de los visitantes eran estudiantes de quinto grado de Birmingham, Alabama, que llenaron el salón de la Casa Blanca para tener la oportunidad de ver al presidente número 45 en la historia del país.
"¡Oh, Dios mío!", gritaron mientras el presidente extendía sus brazos de par en par para anunciar su llegada.
Durante todo el tiempo, ahí cerca de Trump colgaba de la pared un enorme retrato de la ex primera dama que fue rival de Trump en la reñida contienda por la presidencia.
La Casa Blanca ha estado cerrada para los turistas desde el día de la juramentación, a fin de darle tiempo al nuevo gobierno para organizar la logística de atender a visitantes de la mansión presidencial, de 217 años de antigüedad.
Cuando llegaron los alumnos de la escuela cristiana Briarwood, en Birmingham, Alabama, Trump escogió al azar a uno de ellos, Jack Cornish, de 10 años, lo abrazó y le dio una palmadita en los hombros y luego lo envió de vuelta con su grupo, para la envidia de sus compañeros.
Uno de ellos gritó, "¡Eres famoso, Jack!".
El ex presidente Bill Clinton y la ex primera dama Hillary Clinton abrieron las puertas de la Casa Blanca a los turistas un día después de que se mudaron a la vivienda, en enero de 1993. Los Clinton saludaron a unos 1.000 ganadores de un sorteo, acompañados del ex vicepresidente Al Gore y su esposa Tipper.
Ese día, el retrato de George Washington sirvió como fondo del encuentro.
Durante la presidencia de Barack Obama, hubo unos tres millones de turistas a la mansión presidencial.