La diversificación de los cultivos es fundamental para mejorar la seguridad alimentaria y el bienestar general del hogar. Incorporando una variedad de productos saludables, como frutas, verduras, legumbres y proteínas de buena calidad, se puede reducir la dependencia de un solo tipo de alimento y aumentar la resiliencia económica.
Es parte del trabajo que bien realizan un grupo de mujeres de la comunidad El Ojo de Agua, ubicada a 15 kilómetros al suroeste de Nandaime, de forma orgánica, porque estas no utilizan nada de productos químicos para la producción de sus parcelas.
Ellas, desde hace un tiempo, han recibido el apoyo de la asociación Nocharis, que les ha venido capacitando y brindando asistencia técnica en la elaboración de composta, caldos, humus y todos los insumos necesarios para el cultivo orgánico.
En la organización comunitaria hay 10 mujeres y un varón, donde ellos producen sus parcelas de forma diversificada, donde podemos encontrar arroz, frijoles, maíz, flor de Jamaica, cítricos, tubérculos, musáceas, plantas medicinales, plantas ornamentales, así como hortalizas, achiote, berenjenas, pepinos, pipianes, cebollas, apios, perejil, maracuyá y granadillas, entre otros.
Clave para la Seguridad Alimentaria en Nandaime
Según estas mujeres, la diversificación y el cultivo de forma orgánica han fomentado una cultura de consumo saludable y, al mismo tiempo; un ahorro, porque no compran insumos químicos y los producen con materia prima de su misma parcela; ya que aquí no existe la quema de maleza; esta misma sirve como abono a la tierra en materia de descomposición.
Algo interesante es que estas mujeres no desperdician nada, porque también reciclan todo lo que ellas creen conveniente para el cultivo; como sacos, botellas plásticas, llantas viejas, utensilios de cocina plásticos y botes de pintura; así producen hortalizas y hacen que esto se vuelva un patio más bonito y saludable en armonía con la madre naturaleza.
Entre todas estas personas organizadas, cultivan unas 10 manzanas de diferentes productos, los cuales comercializan en la comunidad; otro excedente sale al mercadito campesino en Nandaime, y lo que se utiliza para el consumo diario de cada uno de los hogares.
Y con todos estos aprendizajes, están llevando a cabo un proyecto de acopio y empaque de achiote molido; con sus respectivos registros sanitarios, y al mismo tiempo, el acopio de frijoles para distribuirlos empacados por kilo.