El departamento de Masaya es cuna de la insurrección, referente, de la cultura, del arte y la tradición de nuestro país. Es un pueblo artesano y laborioso que mantiene vivo el legado histórico; su mayor orgullo es su identidad.
«Tenía que llegar un 19 de julio de 1979, que es parte de todas las restituciones de derechos que nos han dado; antes hablar de la cultura era un afrento; siempre la pequeña burguesía nos mantuvo aislados, a un lado, mal vistos con nuestras festividades»; expresó Martha Toribio, tradicionalista de Masaya.
Lee también: «¡Echame pollo pero no hielo!»: Frankling Gutiérrez vuelve al ataque en redes
«El Gobierno del Presidente Daniel Ortega, la Vicepresidenta Rosario Murillo; nos da el privilegio de decir que somos cuna y capital del folclore nicaragüense, nos da el privilegio de ser ciudad creativa y nos da el privilegio de decir somos promotores culturales»; agregó Toribio.
En la actualidad Masaya crece tanto en población, así como en significativas obras que le dan realce a su nombre; las calles tienen mayor durabilidad con el programa «Calles para el pueblo» y esto beneficia a miles de pobladores, dando otra imagen a la ciudad.
«Una gran bendición de parte de nuestro señor Jesucristo, y de nuestro Gobierno sandinista, que se preocupa por el pueblo; nos han traído buses nuevos que vienen a mejorar la flota vehicular»; mencionó la transportista, Yamileth Urbina.
Rehabilitación de parques en Masaya
«En este proceso hemos rehabilitado alrededor de 7 parques; se comenzó con el Parque emblemático de San Jerónimo, posterior primera y segunda etapa del Parque central, donde se hizo el Paseo Sacuanjoche y la rehabilitación de todos los monumentos»; expresó Constantino Tapia, Vicealcalde de Masaya.
«Posterior hicimos una rehabilitación nueva total del paseo Manuel Maldonado; donde se hicieron pistas para hacer ejercicios, canchas, jardinerías, y más»; dijo el Vicealcalde de Masaya.
«Masaya está con vida. Yo estoy feliz que mi nieta goce de los logros y el sacrificio de los miles de héroes y mártires que a lo largo del tiempo dieron su vida para ver estas obras»; concluyó Adriana Brenes.
