Desde el más grande hasta el más chiquito están protegidos contra el virus del COVID-19 en el hogar de Jazmina Rueda, quien esta mañana de lunes llevó a sus cuatro hijos al centro de salud Alejandro Dávila Bolaños, en Masaya, para poder aplicarles la primera dosis del inmunizante llamado Soberana 02 procedente de Cuba.
«Traje cuatro, son cuatro experiencias distintas, edades diferentes. Una 10, el niño de 8, la otra 4 y la más pequeña tiene 2. Yo me vine junto con ellos para que ellos vieran y miraran que me vacuné y agarraron valor también«; dijo Rueda.
«Siempre es importante estar protegidos. En mi hogar ya no falta nadie con vacunas, todos ya están vacunados. Desde mi papá hasta los más chiquitos del hogar, muy contentos por eso»; agregó.
Este departamento tiene como meta vacunar a más de 40 mil niños y niñas de manera simultánea. También se aplica la vacuna Sputnik Light, única dosis a los jóvenes desde los 18 años y se atiende con primera dosis a mujeres embarazadas con la vacuna Pfizer.
Masaya atienda a vacunación contra el COVID-19
«Hoy estamos haciendo una jornada masiva, una jornada amplia, una jornada que está cubriendo a todos los grupos poblacionales del país. Vemos una cosa muy bonita, es que vienen las familias. Se vacuna la mamá, se vacuna el papá con los niños, familias que tienen dos, tres, cuatro hijos»; dijo la doctora Sonia Castro, asesora presidencial en temas de salud.
Además dijo que a nivel nacional «están los 1 mil 86 puestos. Todo lo que es norte, el centro, la Costa; niños, jóvenes desde los 18 años que son los grupos que no habíamos tocado».
«Somos un grupo vulnerable, éramos la parte de la vacunación que no habíamos obtenido la vacuna. Ahora estamos tranquilos que ya ha llegado la oportunidad, para poder evitar más contagios y estar protegidos. Además hay que seguirnos cuidando, teniendo la recomendación y no dejar de usar el alcohol»; expresó el joven José Roberto Alejo, originario de Masaya.
La jornada inició este lunes pero se extiende a una semana completa y es voluntaria. Así mismo es gratuita, llegando no sólo a las zonas rurales de Masaya, sino a todas las comunidades, haciendo más accesible el proceso para las familias.
Nota elaborada por: Thelma Benavides