La madre nicaragüense es esforzada, dedicada en todo lo que hace; son características que definen a Esmirna Murillo, una mujer originaria de Tisma quien visionó su emprendimiento tan solo cuatro meses atrás.
Esmirna es Chefs profesional, estando en su casa y buscando la manera de ayudar a su sobrina que estaba cosechando tomates pero con un precio muy bajo en los mercados, llegó a ella una idea; darle al producto un valor agregado, puso sus manos laboriosas en acción y del tomate nació una dulce y exquisita mermelada.
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Hoy en día esta idea tiene el nombre de Esmidulzura, produciendo muchas mermeladas de una variedad de frutas; cosechadas en las tierras de Tisma. Desde el tomate, chayote, mango, aguacate entre otros.
«Yo no sabia que se podía hacer de un tomate mermelada, en la escuela de hostelería ahí nos enseñaron hacer la mermelada de tomate«, cuenta Murillo.
«Aquí en Tisma se produce mucho el tomate. De manera que mi sobrina cultiva tomate, este producto estaba sin valor; tampoco le daban valor al trabajo que los agricultores hacen. Así que me comentó bastante triste, que había hecho una gran inversión para sacar su cosecha; pero que no pagan ni 50 córdobas por una casilla de tomate. Entonces yo le dije que no se afligiera que íbamos a hacer la mermelada de tomate«, cuenta Murillo.
Las mermeladas de Tisma ahora cuentan con bastante reconocimiento en este municipio. Esmirna participa de las ferias que promueve el Gobierno central a través del Ministerio de la Economía Familiar, Comunitaria, Cooperativa y Asociativa (MEFCCA).
«Siempre estoy innovando algo nuevo, me gusta que el producto se mantenga siempre nuevo, lo voy renovando; la de Chia con tamarindo es un éxito. también la de la pitahaya», afirma Murillo.
«Yo he admirado al Ministerio de Economía Familiar, una de las cosas que nos ha brindado bastante es la publicidad porque si damos a conocer el producto. Además que trabajan con nuestro buen gobierno, es ese gran amor con que chinchonean (miman) a las personas que estamos emprendiendo«, mencionó Murillo.
Murillo forma parte de los emprendedores que se están capacitando constantemente para continuar creciendo. Además Esmidulzura aperturó otra línea de productos; con un valor agregado como los chileros con la marca Esmisabor.
Un emprendimiento hecho con amor
También se dedica a la conservación de frutas de la temporada; esperando esta madre Nicaragüense seguir ampliándose , que sus mermeladas y derivados sean reconocidos en el mercado nacional y porque no, también en el Internacional.
«Tenemos que ser como el abanico, tener varias entradas. Así que cuando a mi me dicen de trabajo , voy lo hago; si me dicen un pastel lo hago. De igual manera si me dicen limpie la cosa yo la limpio; todo por traer el sustento a mi familia con valores», dice Murillo.
