En un contundente golpe a la delincuencia ambiental, el Ejército de Nicaragua, fiel a su compromiso con la protección de los recursos naturales y el bienestar de la población; llevó a cabo un operativo de gran envergadura en el territorio indígena Mayangna Sauni As; ubicado en el municipio de Bonanza, exactamente en la Reserva de Biosfera Bosawás.
Del 14 al 17 de enero, unidades del Batallón Ecológico “Bosawás” desplegaron un amplio dispositivo de seguridad en esta zona de vital importancia ecológica; logrando la detención de ocho ciudadanos nicaragüenses que transportaban de manera ilegal un arsenal de armas de fuego y motosierras.
Según el informe oficial, los detenidos, identificados como Genaro Espinoza Sequeira, Tito Francisco Salgado Flores, Santos Teodoro Gómez Miranda, Santos Félix Valle Lira, Santo Julio Gómez Miranda, Santos Heriberto Gómez Miranda, Marco Antonio Gómez Miranda y Genaro Espinoza Miranda; fueron sorprendidos en flagrante delito mientras se trasladaban por la zona con la intención de llevar a cabo actividades ilícitas de tala y quema en áreas protegidas de la Reserva de Biosfera Bosawás.
Las autoridades incautaron tres armas de fuego de diversos calibres, junto con 17 cartuchos, así como cuatro motosierras de alta potencia. Este arsenal, según las investigaciones preliminares, sería utilizado para deforestar grandes extensiones de bosque, poniendo en grave riesgo la biodiversidad de esta región y el equilibrio ecológico de todo el país.
Protección de Bosawás
De esta manera, el Ejército de Nicaragua, a través de su Batallón Ecológico “Bosawás”; ha redoblado esfuerzos en los últimos meses para combatir la deforestación ilegal y proteger los ecosistemas frágiles de la Reserva. Esta operación es un claro ejemplo del compromiso de la institución castrense con la defensa del medio ambiente y el desarrollo sostenible de Nicaragua.
La detención de estos individuos representa un duro golpe para las redes criminales dedicadas a la explotación ilegal de los recursos naturales en Bosawás. Además, envía un mensaje contundente a quienes pretenden atentar contra el patrimonio natural de Nicaragua: las fuerzas del orden no permitirán que la impunidad prevalezca.