El Capitán Ramiro García Gómez, de 94 años de edad, miembro fundador del cuerpo de bomberos de Granada, describe su experiencia como algo maravilloso. «Yo comencé joven aquí. No sabía cómo era el cuerpo de bomberos, pero con el tiempo, al asistir a sofocar los incendios, fui tomándole amor al servicio», aseguró García, quien tiene exactamente 51 años de servicio y es el miembro de más edad del cuerpo bomberil.
Asimismo agregó, «fui con los bomberos de aquí a ayudar a rescatar a las víctimas del terremoto de Managua, aquí en Granada, hacía turnos, dejando a mi familia, por amor al servicio. Nunca fallé un turno. Nuestro trabajo como bomberos es salvar vidas».
Con un hermoso acto en la estación de bomberos y con la presencia de las delegaciones de Carazo, Matagalpa, Masaya, Managua, Chinandega, Estelí, Boaco y León, se celebró este aniversario, en el que se realizaron ascensos en grados y nombramientos honoríficos para los colaboradores de la institución.
Una familia al servicio de la población, las 24 horas.
«Lo importante es que en esta conmemoración, hoy, estamos unidos bomberos de diversos puntos de Nicaragua, como una sola familia. Nuestro pueblo puede estar seguro de que cuenta con una fuerza bomberil que puede responderles en el momento en el que lo necesiten», expresó Enrique José Chavarría Meza Presidente de la Federación de Cuerpo de Bomberos de Nicaragua.
Es así, pues, qué hombres y mujeres de todas las edades se capacitan y disponen de su tiempo para salvar vidas.
El ahora teniente, Ruddy Muñoz, ascendido en grado durante la ceremonia expresó, que este «es un compromiso con el pueblo de Granada, para servirles. Muchas veces pasamos en las estaciones que en nuestras casas. Llevo cuatro años de servicio y estoy feliz de poder servir a las familias», expresó el teniente Muñoz, quien es parte de la nueva generación de bomberos, que con su juventud y energía, aseguran la continuidad de la institución.
