Este 7 de diciembre de 2024, las familias de Juigalpa, en el departamento de Chontales, se tomaron las calles con fervor y alegría para celebrar una de las tradiciones más esperadas del año: el día de la Gritería. Al caer la noche, el grito unánime de “¡¿Quién causa tanta alegría?! ¡La Virgen de la Concepción!” resonó en toda la ciudad, mientras miles de personas se unían para rendir homenaje a la Virgen María; en una manifestación de fe que iluminó la ciudad.
La Calle del Parque Central hacia Palo Solo fue el epicentro de la celebración, donde se instalaron los altares elaborados por las instituciones del Estado. Con gran dedicación y esmero, estos altares fueron adornados con flores, velas, imágenes religiosas y otros elementos tradicionales que reflejaron el profundo respeto de la comunidad por la Virgen de la Concepción. Cada altar contó con una atmósfera única, creando un recorrido espiritual y festivo que cautivó tanto a los locales como a los visitantes.
Niños, jóvenes y adultos, todos unidos en el mismo sentimiento de devoción, recorrieron los altares, cantaron los tradicionales himnos de la Gritería y compartieron ofrendas con entusiasmo. La calle se llenó de colores, luces y risas, mientras los asistentes disfrutaban de un ambiente de fraternidad y alegría, típico de esta fiesta religiosa.
La colaboración de las instituciones del Estado no solo se reflejó en la creación de los altares, sino también en la organización del evento, garantizando que la celebración transcurriera en un ambiente seguro y ordenado. La presencia de autoridades locales y el apoyo logístico contribuyeron a que la Gritería en Juigalpa se viviera con tranquilidad y devoción.
Gran celebración en Chontales
“Muy lindo, muy bien. Espérenos que me den mi paquete, siempre nos hemos dicho que nunca lo perdemos, hasta que nos muramos. Venimos del barrio Tamanes. Muy buena la seguridad de la Policía Nacional que nos da el orden y las unidades de emergencia ahí están si nos desmayamos”; dijo Zenayda Amador, pobladora.
La Gritería no solo reafirmó el compromiso de las familias juigalpenses con la Virgen María, sino que también consolidó el sentido de comunidad y unidad que caracteriza a los habitantes de Chontales. Una vez más, la festividad demostró la importancia de las tradiciones que nos unen y que, con el paso de los años; siguen manteniendo viva la llama de la fe y la esperanza.
La Gritería en Juigalpa, con su mezcla de fe, devoción y alegría popular, es un evento que perdurará en la memoria colectiva de los juigalpenses, uniendo generaciones y reforzando el vínculo con su patrona, la Virgen de la Concepción.
