Devotos de San Sebastián, provenientes de distintas comunidades rurales de Diriamba, llegaron a la ciudad esta mañana de miércoles a bordo de sus carretas peregrinas.
Así es como tradicionalmente se conoce el recorrido que realizan hasta llegar a entregar sus ofrendas para presentar su aporte a las celebraciones de San Sebastián.
Los promesantes lanzaron leña en los lugares donde se hace la alborada a San Sebastián y se reparten cajetas, pinol, pinolillo, chicha de jengibre, nacatamales y picadillo durante cuatro días.
Además, la tradición cuenta que luego que San Sebastián realiza la visita a estas comunidades rurales de Diriamba; al siguiente día los devotos llegan con sus ofrendas, mismas que son ocupadas para la preparación de los alimentos que se reparten a los miles y miles que llegan hasta las enramadas.
Tradición con las carretas peregrinas en Diriamba
El mayordomo junto al comité organizador de las fiestas preparan las condiciones para que los que también vienen pagando promesas reciban el alimento tradicional como el nacatamal.
Solo para este día, en la casa del promesante Armando Mendieta, en Diriamba; se prepararon 2 mil 500 nacatamales que fueron repartidos durante el día a todos los que se acerquen a profesar su devoción a San Sebastián.
Así mismo, Don Jerónimo González es uno de los promesantes que llega desde la comunidad San Antonio de Abajo, junto a sus dos nietos; quienes le acompañan en este recorrido.
«Salimos de nuestra comunidad a eso de las 5:30 de la mañana para estar muy temprano. Aquí en la ciudad traemos leña y guineos. Llevamos casi 15 años participando en traer ofrendas a San Sebastián, es parte de la tradición de nuestra familia que viene de generación en generación»; detalló González.
Junto a él se sumaron alrededor de 30 carretas que llegaron hasta La Enramada del Mayordomo.
