Miles y miles llegaron desde horas tempranas a congregarse donde fue el aserrío en Masaya; este viernes inició una gran noche de alabanza, adoración y salvación a cargo de la cruzada evangelista Buenas Nuevas.
Y es que las filas para poder ser parte de esta noche llena de fe eran interminables, en busca de milagros, de la salvación; la vida eterna, del gozo que solo Cristo puede dar.
Nosotros venimos de Granada está noche, venimos en familia con nuestra congregación. Estamos seguros que hoy Masaya tiene un llamado, el que encuentra a Cristo tiene asegurado la vida eterna; con júbilo estamos aquí. Es tiempo de darle los corazones que aún no han llegado a los pies de Cristo, esa palabra que tanto necesitan, sólo Dios puede sanar, sólo Dios puede hacer milagros y es el tiempo de sanación es el tiempo de creer»; mencionó Ana María Vargas.
«Que grandiosa noche, estamos seguros que aquí van a hacer muchos milagros, está Cristo moviéndose hoy, está aquí nuestro señor, está fluyendo. Hay ríos de agua viva, sin Cristo no somos nada, Masaya toma la palabra, el diablo anda sediento pero si tenemos a Dios en nuestra vida, quién contra nosotros»; dijo Alberto García.
Jóvenes llenos de fe y vida en Cristo
La juventud cristiana dijo presente, danzaron con júbilo al ritmo del salmista Redimi2.
Dice la palabra de Dios que no podemos ser siervos inútiles. Estamos aquí para honrar su palabra, y todo aquel que tenga sed que venga al padre. Los jóvenes entregamos la vida a Cristo, una vida que nos será plena, es por el que somos salvos y como no dar gracias a Dios por ese amor; por darnos a su hijo para ser salvos», dijo el joven, Carlos Arévalo.
De esta forma, tras concluir la presentación de Redimi2, fue el momento de la palabra a cargo del evangelista Nathan Morris, un poderoso mensaje de salvación entregó al pueblo, desatando yugos; hechicerías, enfermedades, los presentes tuvieron la oportunidad de declarar por fe su milagro.
Para el día sábado 08 de julio, se tiene previsto continuar con esta gran cruzada en este mismo lugar, está vez con la participación de la salmista Marcela Gándara.
