Con el inicio del año escolar una buena noticia llegó a la niñez de la comunidad rural de Aguas Calientes, en el municipio Somoto, a partir de este martes las clases serán diferentes pues en su adecuación curricular iniciarán las clases en inglés con la modalidad multigrado.
Se ha convertido este año en un gran inicio de un paso evolutivo en el desarrollo de la educación nicaragüense en las zonas rurales, donde se brinda equidad y calidad educativa para todos y todas.
Esto representa un gran avance para Nicaragua porque incluye el aprendizaje del idioma inglés para niños y niñas.
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La educación es un derecho de todos y los educadores, administradores de la educación que tienen el compromiso de llegar a todos los sectores con aprendizaje de calidad, sin limitar a los sectores más vulnerables.
Avances en términos educativos
"Un paso importante para la educación porque realizaron el lanzamiento oficial de inglés en la educación primaria multigrado. En Nicaragua estamos haciendo la diferencia, estamos apostando por la calidad educativa y en este caso estamos apostando por el aprendizaje del idioma con los niños de primaria, es algo trascendental y una experiencia única en Latinoamérica”, expresó Mauricio Rayo, asesor pedagógico para la educación en Madriz.
La educación primaria regular de primero hasta cuarto grado ha dejado una exitosa experiencia con estudiantes, docentes y padres de familia y este año se complementa con la primaria multigrado, que abarca gran cantidad de colegios en el campo, beneficiando a la niñez de primero a sexto grado.
Esta iniciativa se desarrolla en núcleos educativos seleccionados para alcanzar experiencias y replicarlas en todos los centros rurales, donde posiblemente se desarrollen las teleclases de inglés que iniciaran en el mes de marzo.
“Los niños ahora con el inglés van a aprender bastante y en un futro a ellos les va servir el inglés ya mayores, y no tanto como a ellos, si nosotros como padres también podemos aprender de ellos el inglés”, destaco Doña Melania Francisca Miranda, madre de una niña de tercer grado.
Es notorio la alegría de los padres de familia, quienes se disponen para colaborar al desarrollo positivo de este programa.
