Su inspiración proviene de la naturaleza y su arte de sus manos laboriosas con las que elabora diferentes figuras de coco, les queremos contar la historia del humilde artesano, don Pablo Alvarado quien aprendió este arte de manera empírica.
“Aprendí de manera natural, nadie me enseñó, es como un don natural que Dios me regalo y lo he aprovechado, el tiempo que tardo en hacer una figura de estas depende del tamaño del coco, por ejemplo con un coco grande tardo una hora y media”, expresó don Pablo.
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El sordo, el ciego y el mudo, son los símbolos que elabora en coco don Pablo Alvarado, a través de sus figuras en forma de monos transmite un mensaje de protección y conservación de la naturaleza.
“Utilice al mono porque son sociables, quise representar la amistad entre el mono y el ser humano, esa forma de pelo representa al hombre y el monito a la fauna, entonces a través de esto quiero transmitir un mensaje de respeto a la naturaleza, a los animales porque ellos también tienen derechos” recalcó Alvarado.
Su arte también lo ha plasmado en las rocas que exponen la rica herencia ancestral de las antiguas culturas indígenas que habitaron la isla hace cientos de años atrás.
“Este trabajo de tallados en piedras yo lo empecé a hacer hace 20 años, después de 10 años me solicitaron un trabajo más grande que lo tenia que hacer en un roca volcánica de basalto, esta figura representa la fertilidad de la tierra porque lo nuestros antepasados adoraban a muchos dioses, dilate más de 3 meses en elaborar esta figura en piedra” manifestó Don Pablo.
A través de las distintas estrategias de gobierno se promueven estos emprendimientos que dinamizan la economía familiar, el Ministerio de Economía Familiar realizó la promoción a este emprendimiento que es parte de la cultura representativa del Oasis de Paz.
Su centro de trabajo se ubica en la reserva natural Ojo de Agua, un sitio espectacular de Ometepe en donde usted puede comprar estas piezas desde los 50 córdobas en adelante.