La tarde de este miércoles 1 de julio la tripulación del barco langostero Encanto del Caribe se llevó el susto de sus vidas cuando la embarcación por poco naufraga, al momento de lo que pudo ser el inicio de la vuelta de campana cuando este se dirigía a realizar la faena de pesca de langostas.
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La embarcación que había zarpado de la ciudad de Bluefields se dirigía con dirección al puerto El Bluff, para luego salir por la barra para ingresar al Mar Caribe y dirigirse a los bancos de pesca.
Golpe de suerte
La suerte para estos hombres del mar, que tripulaban la embarcación, fue que este quedó varado en el canal entre Bluefields y el Puerto El Bluff, zona bastante seca lo cual no permitió que ocurriera la vuelta de campana.
Hasta el momento no se sabe con certeza si este barco llevaba sobrecarga o si esta fue mal estibada, es decir mal repartida en el espacio del mismo barco.
Lo que para estos marinos sería el inicio de la faena de pesca de langosta hubiera sido una tragedia que enlutaría a varias familias costeñas.
Cabe señalar que la carga que este barco llevaba, era la indumentaria principal para realizar la pesca de la langosta, además de cajas de madera con una pequeña plataforma de concreto para que esta pueda permanecer en las profundidades del mar. Estas cajas conocidas como nasas tienen un peso considerado al punto que deben de ser levantadas entre dos hombres.
Una de las ventajas fue que el percance sucedió en la bahía de Bluefields y no en mar abierto, pues la historia fuera otra.
