¡El Vigorón de Doña Matilde!, así se le conoce al emprendimiento que ha pasado de generación en generación, lugar donde se llevó a cabo el lanzamiento de promoción turística este jueves en la ciudad de Matagalpa.
La actividad fue impulsada por la alcaldía de esta localidad junto al Instituto Nicaragüense de Turismo.
Lee también: Carazo: Familia productora de piña trabajan con buenas expectativas
Los pobladores de esta ciudad y de otras llegan a la Perla del Septentrión para disfrutar de la exquisitez de este vigorón, el cual es único en su sabor, calidad y atención que les brindan a sus clientes.
Origen
El Vigorón de Doña Matilde surgió desde la llegada de Matilde Sánchez Vásquez a la ciudad de Matagalpa en el año 1949.
Ella era originaria de la ciudad de León, quien llegó a estas tierras en busca de nuevos horizontes. Poco a poco se fue estableciendo y emprendió con la venta de vigorón sin saber que se convertiría en una marca imborrable, ya que a sus 71 años todos saben dónde están los famosos vigorones de Doña Matilde.
Este negocio ha venido de generación en generación y hasta el momento ya es la cuarta generación que sigue con este negocio, donde en más de una ocasión los matagalpinos han disfrutado de esa comida que, aunque no es típica en esta zona, sí es bien reconocida por la forma cómo se prepara, una cuchara que no ha perdido la sazón.
Tradición familiar
Doña Lesbia Chang es la nieta de quien emprendió con este proyecto, siendo la tercera generación quienes retomaron la iniciativa de Doña Matilde.
“Gracias a Dios este negocio ha ido creciendo poco a poco, antes teníamos una sola venta pero ahora hemos puesto dos más, uno cerca del Parque Morazán y otro por el sector de Guanuca, lo que nos ha permitido ser una fuente de empleo para unas 10 personas. Con la COVID-19 hemos tomado la iniciativa de hacer entregas a domicilio, lo que también nos ha dado resultado”, aseguró Doña Lesbia.
El negocio ya va entrando a la cuarta y nueva generación. La joven Marba Palacios Chang ha decidido seguir los pasos de bisabuela, abuela y madre, quienes toda la vida han trabajado en este proyecto familiar.
“Desde que estaba terminando mis estudios secundarios decidí estudiar marketing y publicidad para dedicarme a crear nuestro propio marca, diseño y logo para venderlo a través de las redes sociales. Mis amigos me decían que por qué me había dedicado a vender vigorón, que si no había estudiado y mi respuesta es claro que me preparé y me preparé para esto, para tener mi propio negocio”, afirmó la joven quien se mostró optimista, entusiasmada y con deseo de seguir sacando adelante el nombre del Vigorón de Doña Matilde.
Este negocio a pesar de los incrementos en la materia prima, mantiene precios accesibles y en ocasión del Día del Padre, este 23 de junio, estarán realizando rifas con sus clientes, una forma de agradecer su preferencia.