Para una familia de pescadores de la comunidad San Marco, en la Isla de Ometepe, la faena inicia desde la 1 de la mañana. A esas tempranas horas se levantan para ir a ganarse el pan de cada día y llevarlo hasta la mesa de sus familias.
Luego de una larga jornada de pesca en el Gran Lago Cocibolca, el bote arrima en la playa, se selecciona el mejor pescado para después ser comercializado en las distintas comunidades del Oasis de Paz, obteniendo de esta manera buenas ganancias.
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El joven Jonathan Sandoval desde muy pequeño junto a su papá aprendió la pesca artesanal, es la cabeza de su familia y ha logrado salir adelante gracias a la capitalización que realizó el Gobierno nicaragüense a través del Ministerio de Economía Familiar, lo que le ha permitido mejorar sus herramientas.
Jonathan explicó que recibió como 30 mil córdobas en calidad de préstamo. El dinero lo invirtió en el mejoramiento de su bote y la compra de material de pesca como mecates, mayas y chinchorros.
“Gracias a Dios y al Gobierno de nuestro presidente Daniel Ortega, hemos adquirido un préstamo que nos viene a beneficiar a nosotros los pescadores, en la manera en que podemos desarrollarnos mejor en nuestro trabajo que es la pesca”, refirió el humilde pescador.
Fritanga da valor agregado al plátano
El proceso inicia con la cosecha del plátano que luego es cortado, seleccionado y llevado a la cocina para freírlo y ser convertido en exquisitas tajadas fritas, que son acompañadas por deliciosos asados de carne de res, pollo y cerdo.
Un equipo de Crónica TN8 visitó en la comunidad Esquipulas la vivienda de Doña Susana Pérez Mendoza, quien nos explicó acerca de cómo surge Fritanga Acevedo, un negocio que ya tiene varios años de existir.
“Es un negocio familiar, trata de la venta de tajadas fritas como una pequeña fritanga la cual hemos decidido hacer porque mi esposo, él tiene parcelas de plátano y él mismo las cultiva, entonces hemos decidido en conjunto con toda la familia de procesar estos plátanos, dándole de esta manera un valor agregado al plátano”, dijo Doña Susana.
Esta señora destacó el apoyo que el MEFCCA le ha brindado a su esposo, gracias a esto ha podido garantizar un producto de mayor calidad.
El éxito de un negocio es atreverse; gracias al impulso del Gobierno nicaragüense se ha logrado establecer una economía creativa que permite a la familia Acevedo salir adelante.
