La alcaldía del municipio San Lucas, en el departamento de Madriz, con fondos propios, comunales y de cooperación logró la ejecución de un importante proyecto de energía solar en dos comunidades rurales.
En el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, desde un derecho humano y su dimensión social, una energía asequible, segura y sostenible es un prerrequisito indispensable para el desarrollo individual y social de las personas, así como de su familia, siendo una de las condiciones básicas en la reducción de la pobreza.
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La energía eléctrica llega a lugares de difícil acceso, donde las condiciones de pobreza son perceptibles en las comunidades de Plan Fresco y Gualiqueme.
El proyecto lleva por nombre “Mejorado el acceso a una energía asequible, segura y sostenible, en comunidades del corredor seco del municipio de San Lucas, departamento de Madriz, Nicaragua”.
Energía solar
En la comunidad Plan Fresco lograron la entrega de 24 paneles solares y en Gualiqueme se entregaron 28 equipos de energía solar a igual número de familias.
Por años los habitantes de estas comunidades han esperado este recurso como restitución a sus derechos humanos, que por su ubicación geográfica se ha tornado imposible llegar con la energía convencional y los paneles solares son una alternativa para llevar luz eléctrica hasta las viviendas.
Ante la necesidad, los beneficiados participaron aportando sus esfuerzos, dando así un aporte importante en la ejecución del proyecto comunal.
La inversión total del proyecto en las dos comunidades supera los 2 millones de córdobas para beneficiar a 52 núcleos familiares, con aporte de la cooperación externa a través de la unidad de concertación municipalista, aportación de la comunidad y la contribución importante de la comuna.
El acceso a energía domiciliar es un derecho humano, se persigue coadyuvar en la mejora de la salud infantil, la calidad educativa y fomentar alternativas de emprendedurismo en las familias.