A unos tres kilómetros de llegar a la ciudad de Siuna está el concreto hidráulico. Para muchos costeños este es un verdadero sueño hecho realidad, ya que hace algunas décadas llegar a la capital se convertía en una experiencia aterradoramente extrema en los más de 300 kilómetros de trayecto.
Los pegaderos, las charcas, los baches eran la triste realidad. Antes de viajar, los pasajeros, quienes abordaban cualquier camión o el bus del transporte colectivo, alistaban comida para al menos una semana, una cobija, una hamaca y la fe en el padre celestial para que la gira no fuese una dolorosa travesía.
En imágenes podemos ver que solo los camiones con doble tracción eran los que podían atravesar los terribles fangos. Don José Orozco, conductor de esa época, menciónó que llegar a Siuna desde Managua era un verdadero sacrificio.
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“Solo los camiones Kamaz, IFA, Tripliquines, Kapetres, las camionetas Land Cruiser, las Was eran los únicos vehículos que podían viajar. Los camioneros nos halábamos entre sí, utilizábamos unos grandes cables y le poníamos chachas o cadenas a las llantas para poder atravesar los pegaderos. Yo recuerdo las tardeadas, ya cuando era noche no quedaba más que sacar tu hamaca, tu cobija y si andabas comida se comía sino se aguantaba. Habían noches que teníamos que pelear toda la noche. Eso fue triste para nosotros los costeños”, expresó el trabajador.
Hoy el cambio ha llegado para los costeños, un verdadero sueño hecho realidad con el Gobierno del poder ciudadano. Un viaje que tardaba cinco días hoy con el Gobierno sandinista se convirtió en un viaje de cinco horas y media, incluyendo pasar almorzando por Muy Muy.
Para la señora Juana Emilia Gómez Pérez, originaria de la comunidad de Tadaznita, jamás se imaginó ver realizada esta obra. “¡Uuuuh!, para nosotros esta es una buena obra, un buen trabajo. Yo jamás me imaginé ver con vida este trabajo, esta es una gran obra. A nosotros nos decían que iba a pasar la carretera pero nunca nos imaginamos que iba a ser tan rápido”, señaló.
Para Doña Guillerma Cisneros, habitante, esta obra garantiza una mayor estabilidad económica para los campesinos, para los transportistas, para toda la población caribeña y nicaragüense. “Yo ahora le vendo mi leche, mi producción de frijoles a quien yo quiera, a quien me pague mejor porque hay competencia. Antes no, antes le vendíamos a quien podía entrar y esa personas nos pagaban al precio que querían”, manifestó.
Esta millonaria obra comprende el tramo de carretera de Río Blanco-Siuna y en estos momentos se encuentra en licitación el tramo de carretera Siuna-Rosita. Se pretende que la construcción inicie en estos primeros meses de este año 2019.
