Disponer parte de su tiempo para estudiar en la escuela de oficio y ponerlos en práctica, es parte de los resultados positivos que ahora el Matrimonio Salazar Alemán de Nueva Guinea se propone a seguir adelante para tener un futuro mejor.
Según doña María José, esposa de don Carlos Salazar, manifestó que "desde que escuchó que a través de las escuela de oficio iban a brindar el curso de vinos se llenó de mucha alegría", y de inmediato dispuso de su tiempo para estudiar dos días que eran los que tenía que desocupar para ser parte del curso y aprender la elaboración de diferentes sabores de vinos a base de frutas.
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"Gracias a Dios, el tiempo lo supe aprovechar y ahora en coordinación con mi esposo estamos poniéndolos en práctica,nuestros conocimientos, ya que con la realización de los vinos estamos participando en las ferias, y la gente está encantada ya que aquí en Nueva Guinea somos los primeros en echar andar esta imaginación", que por mucho tiempo había querido hacer realidad mi sueño, y ahora podrá la población hacer sus pedidos y saborearlos.
Mi esposo es la base fundamental ya que siempre me está apoyando y ayudando a emprender con la elaboración de vino "nos proponemos poco a poco a través del tiempo darnos a conocer y podamos ser parte de una marca original que sea reconocida a nivel nacional e internacional". Nuestros sueños son en grande, quien agradeció al Gobierno por impulsar estos cursos, y velar por las familias a que tengan un mejor futuro.
Mientras que don Carlos Salazar dijo que "el vino es una fermentación de la variación de frutas, contamos con buena higiene y lo mejor que nuestros sabores, las diferentes variaciones están siendo aceptada entre la población", quien también agradeció al Gobierno porque está impulsando a esas personas que quieran salir adelante con los emprendimientos y de esta forma mejorar nuestros ingresos en el hogar y también aportamos a la economía de Nicaragua.
