Los Niquinohomeños, amigos cercanos y familiares, dieron el último adiós al compañero José Santiago Pupiro Nicaragua, oriundo de este pueblo que también vio nacer al General de Hombres y Mujeres Libres, Augusto Nicolás Calderón Sandino.
"Puedo decirle un buen marido, responsable, se esforzó mucho, buenos recuerdos, en las celebraciones del 22 de agosto disfrutó buenos momentos y malos, ya la última lucha que la tuvo fue con la insuficiencia renal, nos quedan solo los recuerdos y el deseo de seguir su ejemplo", mencionó la viuda María Isabel López.
Como buen padre, como buen esposo, como revolucionario, él se integró a la lucha en Monimbó, en aquel tiempo cuando él decía sandinista no era todo mundo, donde "ser sandinista era un riesgo de perder la vida, fue elegido para irse a tomar el palacio, porque él era de los mejores luchadores. Estuvo en la contra revolución que también pusieron los norteamericanos, ya después del 90 él se decidió a hacer su vida", dijo López.
Agregó: “Era un hombre luchador, algo que le decía a sus hijos que ellos tenía que luchar porque decía él, yo luché por la gente pobre, por la gente humilde, tal vez decía él. A mí no me interesa que no me han dado nada, una vaca, un cerdo, una lámina de zinc, pero se la han dado a gente que lo necesita. Yo tengo el pan de cada día, hay gente que no lo tiene, eso decía que eso es por lo cual se debe luchar, que él estaba satisfecho por luchar por esta revolución, él decía me voy satisfecho, porque miré todos los avances y beneficios”.
El compañero Pupiro es recordado por los militantes y la familia sandinista por participar en la gesta histórica de la operación Chanchera junto al Comandante Cero, para derrocar al somocismo y así lograr obtener una Nicaragua libre como la que hoy gozamos. Formó parte del Comando Rigoberto López Pérez y luego se integró a las filas de la Policía Nacional y después a las del Ejército de Nicaragua.
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Después de realizar actos de despedidas en lugares como el municipal del Frente Sandinista, fue llevado el féretro a la iglesia donde se congregaba y donde sus hermanos en Cristo le dieron el último adiós.
El compañero Pupiro era un hombre bien hermanable, fraterno, "quería mucho a todos los compañeros y sabía compartir esa idea revolucionaria, a veces nos ponemos a pensar de cómo iba el proceso y él era bien revolucionario siempre se mantuvo con ese fervor revolucionario", enfatizó Eddy Hernández.
Líderes y representantes del Gobierno Central enviaron sus condolencias y también acompañaron a los familiares en la despedida del Cro. Pupiro que será recordado por su valentía.
Tuvimos momentos duros, los pasamos, es algo que nos sirve de ejemplo a nosotros, es algo que nos sirve de ejemplo a nosotros, los compañeros del comando y nos duele. "A veces el pueblo tiene que darse cuenta que no habrá una revolución sin que los verdaderos sandinistas estén presentes, siempre por la memoria de esos caídos, nuestra posición ha sido firme, el compañero lo demostró todo, él dijo voy a morir siendo sandinista, siendo lo que soy, no habrá camino que nos separe", destacó José Hermógenes Hernández.
Ahora sus restos descansarán en el cementerio de este municipio que le vio nacer.