En conferencia de prensa, autoridades departamentales del Frente Sandinista en León, dieron a conocer una carta dirigida al Presidente Daniel Ortega y a los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, en la misma se exige justicia por las 198 muertes, los incendios y destrucción de infraestructura estatal y privada, todo esto ocasionado por los terroristas golpistas.
«El golpismo terrorista se ensañó en los programas económicos sociales que bendicen a la familia que luchan para salir de la pobreza, esos crímenes de odio cometidos contra el pueblo y las familias emprendedoras y luchadoras que trabajan de sol a sol para dejar de ser pobre, muestran una vez más el carácter clasista y de opción preferencial con los ricos y pudientes que ha asignado al golpismo terrorista de nuestro país», dijo el Secretario Departamental Evertz Delgadillo.
Según Delgadillo toda Nicaragua sabe quiénes se ensañaron para destruir la economía y los programas socio económicos dirigidos para avanzar en contra de la pobreza, «que paguen por sus crímenes», expresó.
En la carta solicitan cárcel para todas las persona que secuestraron el país con los tranques, «como todo sabemos millones de ciudadanos fuimos retenidos en el mayor secuestro Nacional de todos los tiempos, convirtiendo a Nicaragua en una gran cárcel regentada por delincuentes y por terroristas golpistas, financiados por un grupo de vende patria», destacó.
«En esos tranques de la muerte miles de hermanos fueron retenidos, secuestrados, torturados y sufrieron tratos denigrantes, humillantes, en una feroz campaña criminal sin precedente en la historia nicaragüense», continuó leyendo el contenido de la misiva que se exige justicia y reparación ya.
Además, el Secretario Político dio a conocer la recolecta de 20 mil firmas con sus respectivas cédulas de identidad en todo el departamento de León, esto como respaldo a la solicitud de llevar a los tribunales a los responsables de todos los actos vandálicos.
«Que no les tiemble la mano hermano presidente, hermanos magistrados, es un asunto de vida y dignidad, es un asunto urgente para reestablecer y restaurar la paz social», concluyó.