La mañana del jueves 24 de mayo pobladores de Bluefields manifestaron su rechazo a los tranques que violan sus derechos como ciudadanos, firmando una petición para la eliminación de dichos tranques que se encuentran en las carreteras de Nicaragua.
Dichos tranques impiden la movilización tanto de personas, granos básicos, insumos médicos y pacientes que por cuenta propia necesitan la movilización a centros asistenciales en la capital, para así realizarse chequeos médicos como quimioterapia, hemodiálisis, diálisis, entre otros exámenes.
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Javier Treminio, conductor de taxi, detuvo su unidad frente al parque Reyes donde se está recolectando las firmas y bajo la lluvia que cae sobre Bluefields bajó de su taxi para firmar dicha petición. Treminio manifestó que él como poblador no está a favor de los tranques, por que viene a afectar la economía del país y por ende de la región. Dijo también que no sirve tener dinero si no hay nada que comprar en las pulperías.
Él es uno de los blufileños que trabaja a diario y depende a lo que haga compra su comida, por lo cual su forma de ingreso le impide abastecer su despensa al por mayor.
La señora Ángela Zamora Ramírez, habitante de la comunidad La Aurora, también firmó la petición a la eliminación de los tranques, puesto que como productora se ve afectada tanto ella como su comunidad al no poder sacar la producción de los hermanos del campo; tales como queso, crema, cuajada y otras cosechas que producen en la zona. Así mismo señaló que debido a los tranques muchos pobladores que tienen que viajar a Managua a realizar distintas diligencias no pueden hacerlo.
Durante la mañana madres y padres de familia que venían de retirar a sus hijos de los distintos centros de estudios, al pasar por el parque Reyes voluntariamente se detenían a firmar dicha petición.
Adolfo Morales luego de firmar la petición de no más tranques dijo apoyar el diálogo y principalmente el punto de quitar los tranques para poder seguir con el diálogo nacional, puesto que se está afectando el abastecimiento de alimentos en los hogares costeños. Indicó con dureza que es una grosería jugar con el hambre del pueblo y en especial con el de los niños.
En muchos hogares hay madres solteras y niños pequeños que en muchos casos únicamente se alimentan de leche en polvo, la cual tienen que buscar en más de una tienda o pulpería para poderla encontrar, todo por los tranques que afectan directamente a la población nicaragüense.
