Ha sido una eucaristía con mucho simbolismo que solo sucede con el traspaso del guía espiritual de una parroquia y en esta ocasión ese fue el evento al que asistió el Cardenal Leopoldo Brenes y decenas de feligreses en la Basílica de San Sebastián de Diriamba.
El padre Cesar Alberto Castillo fue ordenado sacerdote por su eminencia reverendísima Cardenal Miguel Obando y Bravo el 05 de diciembre de 1992, y es la primera vez que asume una parroquia en su arquidiócesis.
En su homilia el cardenal Leopoldo Brenes recordó una frase que el padre Cesar le dijo cuando lo conoció.
Resaltó que los sacerdotes así como los laicos son corresponsables de las labores de la parroquia y que deben transmitir Alegría para crear en otros la necesidad de ir al encuentro con Dios.
Durante la ceremonia de traspaso se el párroco recibió Las llaves del templo pues es el custodio de la parroquia. Agua y santos óleos elementos, Estola morada signo del poder de perdonar y ministro de la historia de Dios, La Santa Biblia que contempla la palabra De Dios que debe ser meditada y expuesta con sabiduría, los Utensilios para la eucaristía y por último de rodillas el padre cesar hizo su profesión de fe.
También en Managua se realizó una actividad religiosa para honrar el trabajo de Sor Emilia a un año de su encuentro con el Señor
Cuanto amor entregó sor Emília Rachella en este mundo y a los que la conocieron que a un año de su encuentro con el señor sienten su ausencia.
La señorita Marta quien la asistió hasta sus últimos días no pudo contener las lagrimas al recordarla. Ella se dedicó a la evangelización de los más pobres y sobre todo de los niños.
Sus ex alumnas como Marya Ortega dijo que Sor Emilia era muy estricta pero que educaba con amor.
Todos los nicaragüenses dicen que yo soy pidigueña pero pido para Nicaragua, recordó Alejandro Sandigo, asistente a la Homilía.
Su sobrino Diego Rachella quien mantiene vivo su legado digo sentirse muy orgulloso de haber sido sobrino de Sor Emilia.
Monseñor Miguel Mantica dijo que ella iba a pedir a empresarios y funcionarios del gobierno con la convicción que iba recibir ayuda. Sor Emília Rachella conocida como la monjita pedigüeña se entregó a los nicaragüenses e hizo de nuestro país su Segundo hogar.
65 años vivió Sor Emilia en Nicaragua, donde fundó el Colegio María Mazzarello, en el barrio Altagracia, y el Colegio Sor María Romero, en San Judas. El 10 de Febrero de 2017 sor Emília se encontró con el Señor y para conmemorar dicha fecha se ofreció una misa en la que asistieron antiguas alumnas.