Deportistas entregan juguetes a niños de puerto El Bluff

La mañana de este sábado 23 de diciembre en vísperas de la Navidad, la selección de fútbol de Bluefields Copa Augusto C. Sandino y el Movimiento Deportivo Alexis Argüello de la Juventud Sandinista 19 de Julio (JS19J), se dirigieron al puerto El Bluff a entregar un cariño a la niñez de dicho lugar.

Juguetes como peluches, rompecabezas, balones, flautas entre otros más paquetes con golosinas fueron parte de los que recibieron 130 niños y niñas.

Héctor Morataya Alfaro, entrenador de la selección sub 17, es parte de los organizadores de este bello gesto, quien manifestó que se logró todo con el aporte de todos los jóvenes de la selección, quienes cada vez que iban a jugar en un partido llevaban un juguete y así fueron recogiendo poco a poco, más la colaboración de la Alcaldía municipal, el apoyo del Movimiento Deportivo Alexis Argüello y personas particulares.

 

Leyla Braketh, madre de uno de los niños beneficiados, dijo que se siente muy contenta por haber tomado en cuenta a la niñez del puerto El Bluff.

Con el apoyo de jóvenes de distintos movimientos de la Juventud Sandinista se logró que se reflejara una sonrisa en cada niño y niña beneficiada.

El Puerto El Bluff se encuentra frente al Mar Caribe y para poder llegar se debe abordar y navegar en una lancha rápida sobre la Bahía Bluefields, dicho sitio es un barrio más de Bluefields a pesar de su lejanía.

La selección de fútbol de la Copa Augusto C. Sandino y el Movimiento Deportivo Alexis Argüello no solo tienen el compromiso de fomentar el deporte, también de llevar un poco de felicidad a la niñez costeña.

En contexto

Más de 500 niños de diferentes barrios de Río Blanco recibieron juguetes de parte de la Iglesia Católica a través de la pastoral social, como un regalo en esta Navidad. Un gesto digno de admirar y muy bien recibido por los pequeñines rioblanquenses.

Desde las 10 de la mañana de este sábado 23 de diciembre, niños y niñas tuvieron la oportunidad de seleccionar su juguete y llevárselo a su casa, sin obviar la alegría en sus rostros al portar en sus manos el obsequio brindado.