El pueblo indígena conmemora los 525 años de resistencia y dignidad, desde 1492 cuando América fue invadidadefensa de la tenencia de sus tierras, sus creencias y cultura, ante la invasión española.
Teniendo como escenario el Polideportivo de la localidad de Mozonte, las autoridades y pueblo indígena conmemoraron con bailes y cantos ancestrales, así mismo de gustaron sabrosa gastronomía, exposición de frutas y verduras frescas, granos básicos y artesanía típica de la zona.
José Ubence López, presidente de la Junta Directiva del gobierno territorial de la comunidad indígena de Mozonte, dijo que en esta conmemoración la unidad de los pueblos indígenas debe prevalecer, sobre todo en la defensa de las costumbres, tradiciones, pero sobre todo en la defensa del territorio.
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Agregó que aunque todavía hay mucho por hacer, hay avances en la participación del pueblo indígena en la toma de decisiones, las alianzas con las instituciones del Estado, la defensa del territorio tratando de garantizar la armonía y la paz social entre los indígenas y no indígenas. “valoramos que los avances son positivos, hoy gozamos de mayor apoyo con las autoridades policiales, instituciones del Estado y el gobierno local, lógicamente es un trabajo que hemos venido haciendo desde hace muchos años”.
En relación a los avances en la coordinación armónica la Juez Único Local de Mozonte, Dra. Rosa Mirna Guevara Osorto, dijo que de acuerdo con la Constitución Política y sus reformas incluye dentro de sus preceptos el reconocimiento del territorio indígena que goza de un Titulo Real que demarca la extensión territorio 23,700.24 hectáreas, “eso es de lo que ellos tienen dominio, con su propia legislación (derecho real) que les da la potestad de otorgar tierras, viviendas y eso el Poder Judicial lo reconoce y lo respeta”.
La alcaldesa Consuelo Rivera, destacó importantes avances en la restitución de los derechos del pueblo indígena de Mozonte, entre estos la aprobación de una Ley para la promoción de la medicina tradicional en los centros de salud y hospitales, el consentimiento previo, libre e informado a los pueblos indígenas que lo mandata el Convenio 164 de la OIT, el respeto a la tenencia de la tierra, el derecho a una vivienda digna, créditos a las mujeres indígenas para emprendimientos económicos, producción, el impulso de las ferias para la economía familiar, entre otros beneficios.