En la Isla de Ometepe, en el departamento de Rivas, al sur de Nicaragua, la comunidad católica participó en la popular "Fiesta Chiquita" en honor a su santo patrono, San Diego de Alcalá.
Hace 12 años un potente sismo puso en zozobra la zona sur de Nicaragua, el movimiento telúrico fue sentido por la población ometepina, con mucha fe y devoción los habitantes recurrieron con sus oraciones a la imagen milagrosa de San Diego de Alcalá para que intercediera ante Dios y los protegiera del peligro, desde entonces se celebra la popular ''Fiesta Chiquita'', en la cual los fieles devotos le bailan al son de tambores el tradicional baile de Los Zompopos, como una forma de pagar promesas al santo milagroso.
A 12 años de haber iniciado esta tradición religiosa centenares de familias con mucho fervor acuden al templo para bailarle a la imagen, cada 2 de agosto la imagen es bajada de su altar y durante dos días es venerada por los creyentes.
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"Esta ya es una tradición de nosotros los isleños, hace 12 años un fuerte temblor sacudió la isla, creímos que no íbamos a vivir para contar el cuento pero gracias a la intercesión de San Diego de Alcalá, Dios nos salvó de una catástrofe porque ese temblor era para que la isla hubiera desaparecido", manifestó Oswaldo Paizano, fiel devoto de San Diego de Alcalá.
El párroco de la iglesia también celebró junto al pueblo "la fe mueve montañas y aquí miramos a un pueblo creyente, lleno de amor y de fe hacia San Diego de Alcalá. Popularmente, los católicos celebramos a nuestro santo patrono en el mes de noviembre, pero a raíz de que hace unos años ocurriera un fuerte temblor las personas pusieron su fe en San Dieguito y desde entonces se realiza esta celebración llena de fervor religioso que aglomera a niños adultos y ancianos", indico José Ramón Gómez, párroco de la iglesia.
La imagen recorrió las principales calles del municipio de Altagracia, posteriormente los feligreses participan de una vigilia, en la madrugada se realiza la tradicional repartición del tibio, la actividad también es apreciada por turistas de otros países, quienes se quedan maravillados con la rica cultura de nuestro país.