Familias nicaragüenses interesadas en aprender qué hacer y cómo actuar a la hora de una emergencia, participaron este miércoles durante el Ejercicio Nacional para la Protección de la Vida.
Meilyn Alvarado y tres miembros de su familia, sufrieron asfixia por la inhalación de humo tras incendiarse la humilde vivienda donde quedaron atrapados tras registrarse un terremoto de magnitud 7.6 con epicentro frente al Golfo de Fonseca. La alerta inmediatamente activó el sistema, los bomberos trasladaron sus unidades para sofocar las llamas y rescatar a las víctimas.
El suceso forma parte de los tres escenarios habilitados por los habitantes del Reparto Augusto César Sandino, al sur de la ciudad de Chinandega, quienes trabajaron en un plan de repuesta con la brigada municipal de cara al simulacro del Segundo Ejercicio Nacional para la Protección de la Vida, el que tiene por objetivo salvaguardar la vida de las familias nicaragüenses.
“Fue mi primera experiencia y lo disfruté… lo importante que es que aprendí qué debo hacer y cómo actuar a la hora de una emergencia”, manifestó Alvarado.
“Había niños y adultos atrapados con quemaduras. El mensaje es a los demás ciudadanos para que participen en los simulacros para que a la hora de una situación similar puedan sobrevivir y ayuden a otras personas”, indicó Deibi Trujillo.
“En el simulacro participamos un médico y cuatro enfermeras que laboramos en el dispensario del barrio. Realmente fue un trabajo exitoso, atendimos a seis pacientes a quienes valoramos adecuadamente para su seguimiento en un segundo nivel de atención. Sabemos que lo principal en estos casos, es auxiliar a los pacientes”, manifestó la doctora Delmis Muñoz.
El mayor Juan José Canales, miembro bomberil de la ACCBVCH, dijo que “por medio del ejercicio queremos enviar un mensaje a la comunidad con estos simulacros es que se sumen a participar y tomen experiencias de los que podemos vivir realmente a la hora de un acontecimiento, y así salvar muchas vidas”, puntualizó.
De acuerdo a los datos proporcionados por el comité municipal se instalaron 252 monitoreos en cada zona de seguridad, con la participación de unas 39 mil personas, de estas 15 mil varones y 19 mil 58 mujeres, 106 comunidades, 3 mercados, 52 centros públicos, 14 privados, 18 centros de salud, 22 instituciones del estado, 2 instituciones privadas, Cruz Roja Nicaragüense, Bomberos, y efectivos del Ejército de Nicaragua.