El Gobierno Central en coordinación con el Ministerio de Educación y la Alcaldía de El Jícaro, en el departamento de Nueva Segovia, trabajan en la rehabilitación de una infraestructura escolar afectada por un fuerte tornado la semana pasada en este municipio al norte de Nicaragua.
Las escuelas rurales afectadas por el tornado se ubican en las comunidades de San Pedro y La Jumuyca, donde varias aulas de clases fueron sacudidas por las fuertes rachas de viento y granizo que hizo colapsar sus techos, por lo que las clases se suspendieron ante el inminente riesgo.
Henry Jaime Sánchez, Director General de Infraestructura Escolar de Ministerio de Educación (MINED), en una visita de acción extraordinaria orientada por la presidencia de la República atendió de manera inmediata las necesidades para garantizar la seguridad de la comunidad educativa.
“Estamos comprometidos a tomar acciones para garantizar la continuidad de la educación con el apoyo de la Alcaldía y la comunidad que ha garantizado espacios con condiciones para que la educación de los estudiantes no se atrase mientras se realizan las reparaciones”, dijo Jaime Sánchez.
Detalló también que las reparaciones que se realizan son en las cubiertas de techo. “Lo que estamos haciendo es renovar la estructura de madera por estructura metálica para garantizar calidad, mayor vida útil y seguridad de los niños”, recalcó el funcionario del MINED.
La Escuela Sagrado Corazón de María en el municipio de La Jumuyca, donde concurren 116 niños y niñas de preescolar y primaria multigrado, presentó daños en tres aulas de clase. “Hoy podemos ver esa respuesta inmediata de un gobierno preocupado por que niños y niñas tengan esos ambientes dignos, lo que representará seguridad”, dijo satisfecha Cristina Padilla Sánchez, directora del centro escolar.
Por su parte Norma Lisseth Fajardo Estrada, docente de la Escuela Rubén Darío, en la comunidad de San Pedro, dijo que la actuación gubernamental permitirá que los niños estén en mejores condiciones. “Los padres de familia no van a estar preocupados de que sus hijos estén en condiciones precarias pues el Gobierno se ha preocupado trayendo respuesta inmediata a nuestra problemática”, resaltó.
Oscar Noé Herrera Gutiérrez, padre de familia, recordó el susto que se llevaron con el fenómeno natural. “Pasamos un momento muy difícil y pensamos que ya no llevaríamos a los niños a clase porque el peligro era grande”, refirió al tiempo que se mostró contento con la ayuda gubernamental que “vendrá a dar seguridad a los chavalos y la familia”.