Incendios forestales en la zona centro y sur de Chile han afectado más de 5.200 hectáreas, amenazando algunas zonas pobladas y provocando cortes en servicios, informó el viernes la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi).
Debido a las elevadas temperaturas del verano austral y a los fuertes vientos, las autoridades decretaron alertas preventivas tempranas desde la región norteña de Atacama hasta la Patagonia.
El director encargado de la Onemi, Guillermo de la Maza, detalló que al mediodía del viernes había 45 incendios activos en el país y que se ha solicitado el apoyo de Argentina.
«Esperamos que a más tardar mañana en la mañana tengamos la incorporación de más aeronaves», dijo el funcionario a periodistas.
«Se han hecho las gestiones también a través de Cancillería y del Ministerio de Defensa, para tener una reserva operativa, una segunda línea, de ser necesario, con recursos desde Brasil», agregó.
En la tarde del jueves, el Gobierno decretó alerta roja en la localidad central de Casablanca, cercana a la capital, debido a un fuego que ha consumido unas 320 hectáreas, destruido una vivienda y provocado la interrupción intermitente de la vía que conecta Santiago con las costeras Valparaíso y Viña del Mar.
Por otro lado, en la ciudad sureña de Concepción dos viviendas fueron destruidas por las llamas, mientras que otros focos generaron cortes del servicio eléctrico.
En tanto, en la región de Biobío un incendió destruyó unas 2.400 hectáreas, principalmente de predios forestales de la empresa Celulosa Arauco, filial del grupo Empresas Copec.
Las autoridades esperan que en próximos días las temperaturas se moderen, lo que mejoraría las condiciones para controlar las emergencias.
Las zonas afectadas son un 55 por ciento inferior al mismo período del año anterior, según la Corporación Nacional Forestal.
SANTIAGO (Reuters)
