Las autoridades de Filipinas elevaron hoy a 3.621 el número de muertos a causa del tifón «Haiyan», horas después de que la ONU situara el número de fallecidos en al menos 4.400 personas en la región central del archipiélago.
La llegada de ayuda internacional se ha visto complicada debido a las fuertes lluvias que se registran en la zona desde el martes.