Miles de campesinos e indígenas, desde cuatro puntos de la Ciudad de Guatemala, marcharon el miércoles rumbo a la Corte de Constitucionalidad para demandar la nacionalización del servicio de energía eléctrica y rechazar la explotación minera.
Los manifestantes denunciaron que el servicio de electricidad, a manos de una empresa inglesa y otra colombiana, supone altos costos en la casi totalidad de los departamentos del país.
Con grandes pancartas y banderas blancas, los guatemaltecos instaron al Gobierno a frenar el «saqueo y robo de los bienes y recursos naturales», en alusión a las concesiones de explotación minera en el país.
Entre tanto, el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, aseguró que «la nacionalización de la energía está fuera de toda posibilidad».
Agencias