El jefe de Estado subrayó que los diputados alemanes son bienvenidos, pero no como supervisores de proyectos petroleros, porque la colonia se «acabó hace tiempo».
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, defendió este sábado la soberanía de su país al ratificar que no aceptará que un grupo de diputados alemanes actúen como supervisores de proyectos de explotación petrolera en la zona amazónica del Yasuní.
Correa sostuvo que los diputados alemanes pueden visitar su país, pero no como supervisores. «Bienvenidos como turistas, bienvenidos como hermanos; como virreyes, como supervisores, por el mismo avión los embarcamos y los devolvemos a su país señores. Estamos en un país soberano», afirmó el mandatario en su Enlace Ciudadano Nro. 403 desde San Juan de Calderón en Quito (capital).
Durante su informe semanal de labores, Correa resaltó que se «acabó la colonia hace tiempo», en referencia a la pretensión de los diputados alemanes de visitar el Yasuní para constatar denuncias de la oposición derechista.
Fin de injerencia alemana
Este viernes, el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, había informado que el Gobierno de Ecuador dio por terminada la cooperación alemana en temas ambientales.
Patiño le manifestó al Gobierno alemán que Ecuador solo suscribe convenios de cooperación en condiciones de igualdad. «Tanto la (cooperación) que recibimos, así como la que damos es no condicionada y respetuosa, y así se debe dar».
El canciller enfatizó que el Gobierno ecuatoriano «no aceptará que la cooperación se use como un instrumento de supervisión y que no sea respetuosa de la soberanía».