Los socorristas seguían buscando supervivientes este lunes en la isla indonesia de Java, tres días después de un alud en el que murieron al menos 51 personas, según un nuevo balance oficial.
Por otra parte, 57 aldeanos siguen en la lista de desaparecidos después de las lluvias torrenciales que provocaron el deslizamiento de terreno que destrozó todo a su paso el viernes al anochecer en el pueblo de Jemblung.
Las probabilidades de encontrar supervivientes son muy escasas, declaró a la AFP el portavoz de la Agencia Nacional de Catástrofes Naturales (AGC), Sutopo Purwo Nugroho. El anterior balance señalaba 39 muertos y 69 desaparecidos.
Más de mil socorristas, entre ellos soldados y policías, siguen excavando la zona con bulldozers, palas o con las manos desnudas en este pueblo situado en un valle rodeado de colinas y de bosques.
«Rezamos y esperamos poder ayudar a algunos desaparecidos, pero las esperanzas son mínimas», añadió Sutopo.
En Indonesia comenzó la temporada de las lluvias. En esta época son habituales los aludes y las inundaciones. La AGC estima que cerca de la mitad de los 250 millones de habitantes vive en zonas propensas a los deslizamientos de terrenos.
Jemblund, Indonesia | AFP