La abuela del niño afroamericano tiroteado por un policía en EE.UU. la semana pasada ha descrito el incidente como «asesinato».
El sábado pasado Tamir Rice, de 12 años, recibió dos disparos en menos de dos segundos luego que llegara un coche policial respondiendo a una denuncia sobre un adolescente armado en un parque de Cleveland (Ohio. EE.UU.).
«La Policía simplemente asesinó a Tamir. El policía le disparó antes de salir del coche», afirmó Mildretta Warner, de 56, citada por ‘The Daily Mail’.
La mujer duda de la declaración de la Policía de que el agente había demandado al joven tres veces que mostrara las manos antes abrir fuego.
En el video hecho público por la Policía esta semana se ve que Tamir tenía una pistola por encima que apuntaba en distintas direcciones antes de entrar en una glorieta. La pistola resultó ser un juguete.
De acuerdo con los reportes de la Policía, el arma que tenía Rice aquel día era una reproducción del tipo de Airsoft, que se asemeja a una pistola semiautomática que normalmente dispara bolitas de plástico.
El niño murió el domingo en un hospital local tras recibir una bala en el vientre.
La familia del fallecido afirmó en un comunicado revelado por su abogado que la situación podría haber sido resuelta sin abrir fuego.
Al mismo tiempo la familia pidió al público no copiar las violentas protestas que continúan en Ferguson, desencadenadas por la muerte de un adolescente afroamericano a manos de otro policía.
