El asesinato de John F. Kennedy el 22 de noviembre de 1963 hizo olvidar el entusiasmo con el que fue recibido las 24 horas anteriores en su viaje a Texas, un territorio presuntamente hostil al presidente que se rindió a su magnetismo, según relata un nuevo documental de National Geographic.
Un mariachi fascinado con la habilidad para hablar español de Jacqueline Kennedy, un miembro del Servicio Secreto y una invitada republicana al último desayuno del mandatario demócrata son algunos protagonistas de «JFK: The Final Hours», que se emite el viernes en EE.UU. y el domingo en toda Latinoamérica, en el canal NatGeo.
Junto a ellos, testigos que entonces apenas eran adolescentes ayudan a entender por qué, 50 años después, Estados Unidos aún sigue buscando respuestas a la súbita muerte de Kennedy en Dallas, una ciudad que muchos le habían aconsejado no visitar y que le recibió con una sorprendente calidez.
Agencias