Burkina Faso se sumió el jueves en la violencia, con el incendio del parlamento, entre otros destrozos, y un muerto, forzando al gobierno a anular el voto de una reforma constitucional que permitiría prolongar el mandato del presidente, Blaise Compaoré, tras 27 años en el poder.
Los manifestantes incendiaron el parlamento en la capital, Uagadugú, donde los diputados debían votar por la mañana la polémica reforma. Un periodista de la AFP vio arder la fachada y varias oficinas, como la del presidente del Parlamento, cuyo hemiciclo fue saqueado.
Cientos de personas entraron paralelamente en los locales de la Radiodifusión Televisión de Burkina (RTB), cerca del parlamento, y saquearon material a la vez que causaron destrozos en autos. Durante los altercados en la capital, una persona fue hallada muerta con una herida en la sien, a 300 metros del domicilio de François Compaoré, hermano del jefe del Estado, dijo un testigo.
A la vez, centenares de manifestantes eran mantenidos a distancia del palacio de Compaoré por militares de la guardia presidencial que multiplicaban los disparos de advertencia, constató la AFP.
En la segunda ciudad del país, Bobo Dioulasso, la alcaldía y la sede del partido de Compaoré fueron incendiados, señal de que las manifestaciones se están extendiendo más allá de la capital. Los altercados, que se iniciaron el lunes, llevaron al gobierno a anular el voto previsto este jueves de la reforma, que busca revisar el artículo 37 de la ley fundamental.
Este cambio permitiría a Compaoré, que debe abandonar el poder en 2015, presentarse de nuevo a las elecciones presidenciales hasta tres veces, y de este modo extender su mandato 15 años más. El presidente, que llegó al poder en 1987 con un golpe de Estado, acabará el próximo año su segundo quinquenio (2005-2015) tras haber efectuado dos septenios (1992-2005).
UAGADUGÚ, (AFP)