Buscando el pan de cada día, Juan Carlos Espinoza de 35 años por poco y encuentra la muerte al rozar accidentalmente un cable de alta tensión de casi 13 mil voltios. El hombre junto a otros tres compañeros estaban trabajando en el segundo piso de una empresa del mercado oriental.
«Estábamos poniendo un rotulo de publicidad y el rozó el cable de electricidad y cuando vimos empezó agarrar fuego en la cara», manifestó Ignacio Reyes compañero de trabajo.
Quienes fueron testigos de la tragedia llamaban incesantemente a los bomberos que duraron pocos minutos en llegar y auxiliar al hombre que tenía un duelo con la muerte.
Pese al estado delicado del infortunado obrero que presentaba quemaduras de segundo grado, los dueños del negocio no desearon dar declaraciones a los medios de comunicación.
En tanto, los familiares del infortunado fueron avisados vía telefónica de la desgracia ocurrida de los semáforos de Ciudad Jardín una cuadra al oeste.
Periodista: Lenin Franco