El Reino Unido tiene previsto permitir a las empresas de ‘fracking’ perforar en tierras pertenecientes a particulares sin su consentimiento, a pesar de la oposición pública.
El Departamento de Energía y Cambio Climático del Reino Unido (DECC) anunció que seguirá adelante con propuestas para simplificar el acceso subterráneo para los productores de petróleo y gas, a pesar de la objeción de un 99% de los encuestados en una consulta.
El plan que abarca todo el Reino Unido daría a las empresas el derecho a perforar a profundidades de 300 metros o más bajo tierra privada sin negociar el derecho de acceso.
El Gobierno sostuvo que la potestad actual de las personas para bloquear el desarrollo de gas de esquisto en su propiedad conlleva a retrasos importantes y que el proceso legal por el cual las empresas pueden forzar los planes del ‘fracking’ es costoso, consume mucho tiempo y es desproporcionado.
En una consulta sobre la propuesta, el 99% de un total de 40.647 encuestados se opuso a los cambios legales para dar a las compañías de petróleo y gas acceso subterráneo sin tener que pedir permiso a los propietarios.
El ministro de Energía británico, el conservador Matt Hancock, dijo que «estas nuevas normas ayudarán a Gran Bretaña a explorar el gran potencial de nuestros recursos nacionales de gas de esquisto y geotérmica, a medida que trabajamos hacia un futuro más verde y a crear miles de nuevos puestos de trabajo».
Jane Thomas, activista principal de Amigos de la Tierra, dijo en un comunicado que «este Gobierno parece empeñado en el ‘fracking’, independientemente de la amplia oposición. Uno pensaría que con la aproximación de unas elecciones generales, los políticos escucharían a la opinión pública y apoyarían las soluciones energéticas populares de corte de residuos y respaldo a las energías renovables».
El Gobierno de Escocia también condenó rápidamente el anuncio. El ministro de Energía escocés, Fergus Ewing, dijo que las decisiones sobre la extracción de petróleo y gas en Escocia deben ser tomadas por las personas que viven allí. Ewing señaló que «las propuestas del Gobierno del Reino Unido para eliminar el derecho de los dueños de vivienda escoceses de oponerse a la perforación en sus casas, sin ni siquiera un debate en el Parlamento de Escocia, va en contra del enfoque cauteloso, considerado y basado en la evidencia sobre esta cuestión de Escocia».