Una mujer y su familia se salvaron de morir calcinados dentro de su vivienda, luego que en un acto de vandalismo, un grupo de delincuentes intentaron prenderle fuego con gasolina.
Los sujetos aprovecharon la lluvia y la oscuridad de la noche con el fin de no ser identificados, sin embargo, la afectada logró reconocerlos tras despertarse azorada al escuchar el bullicio que se tenían los malandrines mientras rociaban la gasolina alrededor de la propiedad de Sonia Nazaret Hernández Reyes.
«Estaba acostada cuando a eso de las 2:45 de la madrugada, escuché pasos y sentí el olor a gasolina, segundos después oí una explosión y al llegar a la sala vi como las llamas de fuego venían del frente de la casa, me sentía impotente como en estado de shock, no podía hablar, ni gritar solo pensaba en mis tres niños, una nieta de dos meses y mi papá un anciano de 78 años de edad, pensé que moriríamos quemados porque la casa estaba con candado y no podíamos salir por ningún lado, gracias a Dios el fuego no avanzó porque las paredes y las puertas estaban mojadas por la lluvia, de lo contrario la historia fuera otra» explicó Hernández Reyes.
La afectada dijo a la Policía que el acto vandálico está relacionado a una vieja rencilla personal con una vecina a quien identificó como «Alexa», quien supuestamente en una ocasión le apuntó con un arma de fuego y la amenazó con quemarle la casa.
El caso ya está en manos de la policía, los agentes de investigación y peritos de la Dirección de Auxilio Judicial, encontraron rastros de humo en la acera, paredes y puerta de la casa por indicio del fuego y dos pichingas que aún tenían residuos de gasolina.
Hace una semana la municipalidad inauguró un puesto policial en el sector con el fin de disminuir la actividad delictiva. El comisionado mayor Douglas Pichardo, jefe departamental de Chinandega, dijo que el caso está siendo investigado y que en los próximos días ejecutarán un plan para desarticular cualquier agrupación delictiva y los expendios de drogas.
Belkiss Medina
