El curso escolar inició de manera oficial en la Franja de Gaza con un retraso de dos semanas, después de un fuerte verano en el que la última ofensiva israelí causó una enorme destrucción en los colegios y dejó más de dos mil palestinos asesinados.
Estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos también para resolver el problema de las personas desplazadas que se refugiaron en los colegios», precisó el comunicado.
Durante los 50 días que se prolongó el conflicto, la Franja fue blanco de intensos bombardeos que según cálculos locales, afectaron a alrededor de 20 mil construcciones y unidades de viviendas. Los ataques dejaron a más de dos mil palestinos muertos, de los cuales 400 eran niños.
Miles de residentes se vieron obligados a abandonar sus hogares y buscaron refugio en colegios puestos por la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa), que quedaron abarrotados y con los pocos recursos pudieron brindar ayudar al cerca de medio millón de desplazados.
El curso comenzó hace dos semanas en Cisjordania, pero en la Franja se retrasó debido a la destrucción, la falta de medios y preparación de los colegios, apenas días después de que se alcanzara un alto al fuego en la zona el 26 de agosto.
